A continuación os doy algunos tips para mejorar en la realización de una entrevista de trabajo. Hay muchos aspectos en los que podríamos fijarnos, pero vamos a comenzar por estos:
Puntualidad
- Conocer bien el sitio, prever posibles contratiempos y salir con suficiente margen te ayudará a llegar con suficiente antelación a la entrevista (10 minutos antes es suficiente).
Actitud
- La combinación de amabilidad, profesionalidad y energía suele ser ganadora. La amabilidad nos hará aptos para el trabajo con otras personas, sean compañeros o clientes. La profesionalidad transmitirá solvencia. Por último, mostrarnos como personas con energía (no nerviosos) permitirá que nos vean como personas activas, con ganas de trabajar. A pesar de ello, siempre es recomendable analizar el puesto con un especialista para ver si hay otras actitudes que puedan ser clave.
Comunicación verbal
- Expresarse con claridad es muy importante, especialmente en aquellos trabajos donde la comunicación o la negociación son clave. Es desaconsejable responder de forma impulsiva o irse por las ramas, ya que probablemente diremos cosas que si las pensáramos dos veces no las diríamos. Preparar la entrevista con un especialista ayuda a tener las ideas claras y organizadas, lo que permite dar respuestas rápidas y eficaces.
Comunicación no verbal
- Hay una serie de protocolos de cortesía y formalidad que son adecuados para una entrevista de trabajo. Algunas ideas son dar la mano con firmeza, mirar a los ojos, no sentarse hasta que nos inviten a ello, mantener una postura erguida, pero sin excesiva tensión (ej. sin levantar los hombros, tics, etc), no levantarse hasta que nos lo indiquen, acompañar los mensajes con gestos moderados y acordes, etc.
Mensaje
- Como podéis imaginar, éste es probablemente el apartado más importante y complejo de la entrevista. Aquello que decimos es lo que nos define como candidato a ojos del entrevistador, y es importante haberse preparado bien para saber cómo responder a cualquier pregunta. La idea no es memorizar respuestas, sino conocerse bien como candidato y conocer bien lo que buscan, para seleccionar dentro de todo lo que podríamos decir, aquello que mejor encaja (siempre desde la sinceridad). Preparar la entrevista con un especialista en RRHH nos va a ayudar a tener las ideas mucho más claras y ser capaces de responder con espontaneidad y eficacia. También nos va a ayudar a estar mucho más tranquilos y transmitir seguridad, al saber que lo que estamos diciendo es adecuado y nos acerca a ese “perfil ideal” que busca el reclutador.